La atención de las personas cada vez tiene más estímulos. Hoy en día cada uno puede consumir exactamente lo que desea, desde su pantalla. Por lo tanto, cuando algo se nota que no es auténtico, rápidamente pierde relevancia. Se nota mucho la copia burda. La autenticidad es el principal diferencial de cualquier marca hoy en día. Su tono y manera de comunicar es la clave.
Lo veo mucho en las nuevas generaciones -me incluyo- que consumen contenidos vía streaming. Esto quiere decir que las personas empatizan con personas. Con pares. Y eso es una fortaleza, porque cada streamer no compite directamente con sus pares, sino que buscan cooperar entre sí para que todos ganen visibilidad.
De hecho, para que entiendas esta cooperación, dentro de Twitch existe un comando para cuando termina uno de transmitir le pasa su público a otro streamer. Ahí empieza la cooperación.
¿Por qué traigo esto? Porque creo que la autenticidad de las partes, hace que el resultado global sea mucho mejor. Porque le permiten a las personas elegir que mirar. Si un día queres ver un e-sport, miras a alguien que es profesional de ese mundo. Si otro día queres reírte, miras a algún streamer que esté conversando con su público.
Cada uno tiene montado su «propio show» y el público sabe qué tipo de contenido va a recibir de cada uno. Y puede elegir. Por lo tanto, su atención no está invadida, sino que está dirigida hacia lo que desea en ese momento. Y los streamers construyen comunidades (como la Coscu Army, a la cuál sigo), en donde generan contenido cruzado y de esta manera crecen a una velocidad mucho mayor.
El flywheel es el nuevo concepto de embudo, donde la propuesta sucede alrededor del cliente y este recibe valor constante (y cada vez mayor).
Por ejemplo, el flywheel de este mundo del streaming sería:
Más generadores de contenido (comunidad).
Genera más propuesta para el consumidor.
Trae más variedad y cantidad de consumidores.
Eso atrae la atención de las marcas para anunciar.
Las marcas anunciando generan ingresos para los streamers.
Los streamers pueden brindar un «mejor show» con esos ingresos.
Eso genera más propuesta para el consumidor.
Y la historia sigue en forma de círculo.
La autenticidad, hoy en día, es la moneda de cambio por la atención de las personas.
Lo que deberías pensar es… ¿Estoy siendo lo suficientemente auténtico con mi público para que se enganchen con mis contenidos? ¿O estoy constantemente buscando donde copiar mis ideas?
En nuestro caso, por ejemplo, cuando comenzamos nuestros negocios siempre fue bajo la premisa de mantener nuestra esencia de vida en la naturaleza, deportes extremos, etc. Es por eso, que no dudamos ni un poco en salir con una gorra en una videollamada con clientes. Ni siquiera nos lo cuestionamos. Y ellos lo entienden y nos conocen así. Es parte de nuestra autenticidad.
No cambies tu esencia para aparentar.
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